Percepción de la situación económica del estado de Yucatán.
La semana pasada comentábamos sobre el alud de información publicitaria que recibíamos de parte del gobierno del estado a través de la cual se destacaban las acciones realizadas en lo que va de la gestión, con el evidente propósito de influir de manera positiva en la opinión pública.
El mayor énfasis se dio a los temas económicos, en especial los apoyos otorgados en el sector, empleos creados, inversiones multimillonarias, etc. Quedaba claro que en nuestra conciencia debería instalarse la seguridad de que el desarrollo económico del estado es un hecho incontrovertible y los yucatecos en este como en otros temas debemos de sentirnos en la cresta de la ola.
Al respecto nos pereció interesante contrastar la información proporcionada por el gobierno estatal con la opinión de los yucatecos sobre la situación económica actual con respecto al año anterior; Para ello entre el 17 y 22 de enero realizamos una encuesta cara a cara entre 800 personas de 18 años y más residentes en Mérida con credencial de elector. De los resultados obtenidos compartimos lo siguiente:
Solo el 7.6% cree que la situación está mejor, la mitad (49.9%) cree que está igual y un 41.4% que está peor. En las mujeres la percepción negativa está un poco más acentuada ya que el 43.9% afirma que la situación está peor. La tendencia es similar en los respectivos grupos de edad, de hecho ningún grupo de edad supera los 10 puntos porcentuales con una calificación de mejor situación económica.
Las cifras no mienten y confirman algo que aunque es evidente, pareciera no formar parte de las preocupaciones gubernamentales. No estamos frente a una opinión pública manipulable e influenciable al cien por ciento. Muy por el contrario, cacarear sin fundamento puede redundar en una mayor desconfianza ciudadana. Entonces queda claro que frente al optimismo del gobierno y su entusiasmo por contagiarnos, hay una realidad que en lo cotidiano nos receta aumentos en el precio de los servicios, nuevos impuestos, gasolinazos y otros golpes de esa naturaleza.

