Con el aumento de la inseguridad, particularmente con la proliferación de robos a casa habitación y negocios, se ha detonado la oferta de servicios de protección y custodia en el Estado. En 2004, según los censos económicos, existían 24 establecimientos que ofrecían este tipo de servicios. En 2014, la cifra casi se duplica (46). Esta industria ocupa a cerca de 3,200 empleados, siendo una de las que peor remuneración le otorga a su personal; en promedio el ingreso mensual de un empleado en el sector es de 3,600 pesos mensuales, es decir, la industria paga en promedio dos veces el salario mínimo.

El tamaño de mercado del sector oscila en los 576 millones de pesos anuales, siendo este uno con bajo porcentaje de inversión: apenas el 5.4% de las ventas anuales, sin duda un atractivo pastel repartido entre menos de 50 participantes.